Esto me pasó está mañana:
Fui a entregar unas bolsas de Rúgula a un pequeño negocio que queda en Barrio Obrero en la vía al viaducto nuevo donde venden pizza por porciones. El combo vale veinticinco bolívares e incluye un vasito pequeño de nestea.
Entregue las dos bolsas que me habían pedido y en ese momento llegó una señora muy humilde, vestida con ropa desgastada por el uso y por el tiemo, sacó un pequeño monedero y comenzó a contar billetes de dos y de cinco, entonces pidió un combo para llevar.
" - despáchela a ella primero." Dije.
" - Pero le tengo que envolver la pizza." Dijo la joven que nos atendía.
Entonces la miré y le dije:
" - No importa, tómese su tiempo y cóbreme lo de la pizza de la señora que yo le brindo.
La mujer me miró y sonrió dejando ver una dentadura incompleta y acabada por los años y la miseria y me dijo:
" - Hoy si que me han brindado, es Dios ¿verdad?
" - Si, es Dios." Le respondí tratando de evitar que viera cuán emocionado estaba yo.
" - Nuestro Señor Jesucristo." Dijo la mujer, tomó su combo y no supe por donde, pero desapareció.
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