martes, julio 26

EL MENOS COMUN DE LOS SENTIDOS

Dicen que de músico poeta y loco todos tenemos un poco. Las ciudades reflejan en mucho esas tres cualidades de sus habitantes. En San Cristóbal por ejemplo tenemos excelentes orquestas, grupos de Jazz, grupos corales, voces insignes, poetas destacados, escritores de éxito y pare usted de contar.
Pero en el conglomerado humano de la ciudad también existen unos cuantos locos, a ellos les debemos por ejemplo el tener un faro en una ciudad que está a cientos de kilómetros del mar, un obelisco que si se mira detenidamente representa al popular signo de la puñeta y que además tiene una leyenda que dice de la colonia italiana al pueblo de San Cristóbal. Se dice que este obsequio tan simbólico fue hecho por los “Inyenieros Construtores” que monopolizaban la construcción de obras civiles cuando se les exigió que todas las obras que se construyeran debían ser proyectadas y supervisadas por Ingenieros colegiados.
Pero las locuras de mi pueblo no terminan allí. Es frecuente ver como el trafico es detenido en las calles mas transitadas de San Cristóbal para dar paso a una carrera de bicicletas o a una caravana en honor a una reina de cualquier evento, porque aquí para todo se elige una reina y se hace una caravana. Ahora les ha dado por cerrar las calles mas comerciales los días sábado para hacer mega mercados populares, que no es otra cosa que vender productos subsidiados por el gobierno dentro de la Misión Mercal en la cual participan civiles y militares. En la ciudad sobran terrenos donde hacer estos mercados, existe un sin nuúmero de estadiums con exelentes estacionamientos que podrian brindar cabida a esos mercados. La plaza de toros tiene espacio de estacionamiemto para millares de automóbiles, hay además un gran parque de exposiciones.
Las avenidas no se escapan de la locura, el gobernador hizo poner en sus islas maceteros de barro para sembrarles plantas, como si las islas no estuvieran diseñadas para sembrar las plantas directamente. Ya un buen número de maceteros han sido destrozados por vándalos o por conductores ebrios o descuidados que se meten a la isla al perder el control de los vehículos.
Otra locura debe tener origen en algún comité que se reúne en la alcaldía y que decidió poner en medio de la isla de la avenida 19 de abril a la altura de la Normal Román Valecillos una verja de hierro forjado pintada en color verde brillante. No se si lo hicieron para proteger los materos a los que me referí anteriormente o para evitar la proliferación de los vendedores ambulantes, mendigos y malabaristas que suelen utilizar la isla de la avenida como sitio de trabajo.
Pero lo mas loco, por la irresponsabilidad, falta de previsión y de inteligencia, que he visto es que en medio la única vía rápida de la ciudad, la avenida Antonio José de Sucre, me imagino que la gobernación, ha decidido instalar un parque infantiles. Los vehículos transitan allí a velocidades que van de los cincuenta a los cien kilómetros por hora. El parque, al ser infantil, va a ser usados por niños y el único acceso es la calzada de la autopista. Por favor no le echen la culpa a los gochos porque el gobernador es caraqueño, como la mayoría de su equipo.
¿Habiase visto semejante locura? Por algo dicen que el sentido común es el menos común de los sentidos.


VISITE TAMBIEN HUELLA DIGITAL

No hay comentarios.: