Haití, un año después.

Un saludo solidario al pueblo de Haití después de un año del terremoto que dejó a millones de personas en la miseria, acabó con la infraestructura y quitó la vida a cientos de miles y generó la peor epidemia de cólera en siglos.

Hoy mientras los haitianos lloran a sus muertos y llevan coronas de papel a las fosas que sirven de tumbas colectivas a sus familiares, no hay dinero para flores naturales, hoy elevamos una plegaria por los sobrevivientes, muchos hubieran preferido morir.

Haití nos duele, porque su pueblo sigue sufriendo después de un año de vicisitudes, un año en el que la esperanza se ha esfumado ante la dura realidad.

Jose Luis Restrepo