Circula la noticia de que el Vaticanoahora se preocupa también por la salud espiritual de quienes a diario tenemos que tomar el volante para llegar al trabajo o a cualquier otro sitio. Al efecto han creado un decalogo que contiene los diez mandamientos del conductor, revisenlo y revisense para que la próxima vez que vayan a confesarse lo tomen en cuenta:
Los 10 mandamientos católicos de la carretera:
No matarás
Conducir quiere decir controlarse
La carretera sea para ti un instrumento de comunión entre las personas y no de daño mortal
Sé caritativo y ayuda al prójimo en la necesidad, especialmente si es víctima de un accidente
El automóvil no sea para ti expresión de poder y dominio y ocasión de pecado
Convence con caridad a los jóvenes y a los que ya no lo son a que no se pongan al volante cuando no están en condiciones de hacerlo
Brinda apoyo a las familias de las víctimas de los accidentes
Reúne a la víctima con un automovilista agresor en un momento oportuno para que puedan vivir la experiencia liberadora del perdón
En la carretera tutela al más débil
Siéntete tu mismo responsable de los demás”*LA ILUSTRACIÓN ES DEL ARTISTA LLUIS CADAFALCH
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