La Primera Vez.

Siempre se tienen veinte años en un rincón del corazón...

aunque sea al lado del marcapasos.

No recuerdo la primera vez que me llamaron por mi nombre, pero el día que miré en su cuna a mi primer sobrino por primera vez recordé como si estuviera viendo una película la cara de mi padre mirándome en mi cuna y lo que es mas sorprendente aún, recordé su olor. No recuerdo cuando fue la primera vez que me dijeron Papá, pero si recuerdo que mi primogénito Juan Cristóbal me sonrió por primera vez, también recuerdo que dijo primero papá que mamá. No recuerdo cuando fue la primera vez que me dijeron señor, pero si recuerdo que me causó preocupación porque me estaba volviendo mayor.

Tampoco recuerdo cuando fue la primera vez que me dijeron doctor, pero si recuerdo que me sentí incomodo y me costó acostumbrarme, también recuerdo que no mucho tiempo después, subiendo porlas escaleras del edifio Nacional, sede de los tribunales, alguíen gritó doctor y mas de veinte personas miramos al que gritaba, pues cada uno de nosotros pensó que era a el a quien llamaban. No recuerdo cuando fue la primera vez que me dijeron jefe, pero recuerdo que creí que me lo decían por la jerarquía que tenia en la empresa donde trabajaba, luego comprendí que así le dicen a las personas mayores.

No recuerdo la imagen que veo cuando me miro en el espejo, siempre me sorprendo porque me recuerdo como cuando tenia veinte años y ahora que recuerdo en mi casa, la casa de los viejos, hubo por mucho tiempo un plato de cerámica pegado en la pared con la inscripción “siempre se tienen veinte años en un rincón del corazón”, entonces me parecía que veinte años eran muchos años.

Por cierto buscando la frase en la web me encontré el siguiente comentario “siempre se tienen veinte años en un rincón del corazón...aunque sea al lado del marcapasos”. No pude conseguir el autor de la frase original, pero el de esta complementada es del grupo Les Luthiers, los famosos músicos y humoristas argentinos.

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