martes, abril 19

LA GLORIA DEL OLIVO ¿SE CUMPLE LA PROFECIA?


Realmente no sabemos como será el papado de Benedicto XVI, el Papa electo hoy por el Conclave Cardenalicio en Roma. En anteriores posts habíamos señalado que de acuerdo alas profecías de San Malaquias el nombre de este papado seria De Gloria Olivae, es decir de la Gloria del Olivo, y habíamos señalado que podría ser por razón de que los tiempos en los cuales regirá podrían ser tiempos de paz mundial, eso aún está por verse; Sin embargo, resulta curioso que el nombre elegido por su Santidad sea el de Benedicto XVI, pués Benedicto XV fue conocido como el Papa de la paz. Giacomo della Chiesa, Benedicto XV, nació en Génova (norte de Italia) el 21 de noviembre de 1854 y murió el 22 de enero de 1922. Designado el 3 de septiembre de 1914, a poco de estallar la Primera Guerra Mundial, pasó a la Historia como un Pontífice que quiso imponer la fuerza del derecho internacional frente a los conflictos bélicos.
Defendió la neutralidad del Vaticano y se implicó mucho en la pacificación y posteriormente en la Sociedad de Naciones. Admiraba a Aristide Briand y restableció en 1921 las relaciones diplomáticas con Francia, rotas en 1904.
Escribió la encíclica Maximum Illud, en 1919, en la que pedía la separación entre las actividades misioneras de los católicos y las coloniales de los países occidentales.
Bajo su gobierno aumentó el fervor de los fieles por la eucaristía, a la que el difunto Papa Juan Pablo II dedicó el 2005.
Como les hemos contado en posts anteriores San Malaquias profetizó que habrían 112 Papas desde su época hasta el fin de los tiempos. Benedicto XVI es el 111.
Sobre el reino de la paz en la tierra para estos días, los finales de la historia según las profecías parecería haber contradicción.; Sin embargo, Malaquias nunca dijo que estos tiempos serían de paz. Hace unos días, el 11 de abril para ser exactos, otro profeta, este menos creíble, un estigmatizado llamado Giorgio Bongiovanni, quien dice tener revelaciones de la Virgen María y de otros seres celestiales publicó en internet este curioso mensaje: El próximo sucesor de la Iglesia de Pedro será extremo. nosotros conocemos perfectamente los enredos de la corte cardenalicia del estado del Vaticano.
Para nosotros, seres de luz, la verdadera iglesia de cristo es el templo humano sobre el cual se posa el espíritu que proviene del padre.
la iglesia de cristo es la humanidad y no esta hecha de materia, recordad: “el templo de mi padre no está hecho de piedra”.
El próximo representante de la iglesia católica apostólica romana, el Pontífice Supremo, estará cargado de extremismo. no podemos deciros nada más por el momento.
pronto volveremos a tratar este tema para profundizar y analizar este tipo de acontecimientos. Y a continuación suscribe como médium de un “mensajero de Luz Divina” llamado Shetum Shenar.
Coincide este mensaje con el criterio que sostiene que Ratzinger representa el ala mas conservadora de la iglesia, que perteneció a las Juventudes Hitlerianas, aunque sus biógrafos hacen la salvedad de que no era muy entusiasta y que como Prefecto de la Congregación de la Doctrina de la Fe, es sucesor del Santo Oficio de la Inquisición. Confieso, que entiendo muy poco de las cuestiones de la alta jerarquía de la iglesia, pero yo, un simple cristiano, informado hasta a donde podemos estar informados en esta era de comunicaciones al instante, hubiese querido un Papa un poco más liberal. Creo que la sociedad actual exige que la Iglesia avance con nuestros tiempos.
En los años sesenta con el control de la natalidad, con los contraceptivos o anticonceptivos se inició la llamada revolución sexual. Muchos tabúes han desaparecido de la sociedad, la mujer ha alcanzado mas altas posiciones en las sociedades de occidente. La iglesia ha sido opuesta desde entonces al uso de los métodos anticonceptivos con los cuales se ha pretendido frenar la explosión demográfica, razón por la cual han sido no solo aceptados sino promovidos por la sociedad occidental en su casi totalidad. La aparición del sida, por otra parte ha hecho que prolifere y se promueva desde los sectores oficiales encargados de la salud pública el uso de preservativos. La escalada de la mujer en las diversas posiciones y el avance de su lucha por la igualdad de derechos ha hecho, por otra parte, que la indisolubilidad del matrimonio pase a un segundo plano y proliferen los divorcios civiles mientras la iglesia califica de pecado las segundas uniones de quienes por múltiples razones han debido optar por la separación civil.
Por otra parte la disminución de vocaciones sacerdotales en parte ocasionada por la prohibición del matrimonio para los ministros de la iglesia y la tendencia a la unificación de las iglesias, son problemas que junto a los anteriores deben estar en la mira del nuevo Pontífice.
La opinión parece estar ya dicha, a Ratzinger se la ha llamado el cardenal del no, según informan hoy los medios. Es la figura más conservadora de la iglesia según algunos. Sus posiciones, se dice, han sido radicales. Sin embargo; también se ha dicho que es el portador de la voluntad del anterior Papa de que se convoque a un nuevo Concilio que traiga nuevas reformas a la Iglesia. Su Papado, por razones eminentemente naturales, promete ser corto, pero como dije antes, apenas se inicia y habrá mucha tela que corta.
El Espíritu Santo es el guía etéreo que inspira a los Pontífices, tengamos fe para que guíe a este nuevo pontífice por la senda de la paz y que este a su vez nos guíe a nosotros por el camino del bien.

José Luis Restrepo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Siempre me pareció muy curioso el hecho de ese empeño de algunos en qie La Iglesia cambie, que si son otros tiempos, que hay que ir con ellos, que debe ser más flexible...¿Por qué no cambian los Judios su Talmud que es más antiguo y desde luego le vendrían muy bien muchos cambios? ¿Por qué no cambian los musulmanes su Corán, que tampoco les vendría mal si nos ponemos a criticar? ¿Por que no los Budistas? los Shintoistas, los Hindues, los Chamanes o los Hechiceros africano, etc., etc.,etc...
La Iglesia NO DEBE CAMBIAR. Bastante mal le ha hecho el último Concilio Vaticano II, que la ha convertido en una especie de imitación Luterana, que ha conseguido acabar con la fe de muchos fieles, y con las vocaciones de sacerdotes y monjitas. Que no cambie más a menos claro que queramos que acabe de caer, para no levantarse más, para júbilo de los adoradores del Nuevo Orden Mundial.

Anónimo dijo...

Hay cosas que no deben cambiar, c0mola doctrina por ejemplo, pero otras si. Si nos atenemos a tu opinión deberiamos aceptar a estas alturas que la tierra es plana y que es el centro del Universo.
Gracias por tu comentario. Saludos