Pornografía.

Hace dos años, cuando me mudé al edificio Ciudad de Nutrias estuve sin servicio de Internet en casa. Mi hijo Juan Cristóbal, para entonces de siete años comenzaba a dar sus primeros pininos en la Internet, por lo cual decidí llevarlo a un cyber café a conectarse en la red para que pudiera practicar esta nueva habilidad que estaba desarrollando. Al tomar el equipo me percaté que tenia u acceso directo a una página pornográfica. Puse en conocimiento al encargado del negocio quien se excusó diciendo que eran los “muchachos” que usaban el servicio quienes ponían esos accesos. No dudé en apurar la instalación del Internet en mi apartamento para poder controlar en cierta manera el uso de la red por mis hijos.

Hoy CNN informa que en una encuesta 4 de cada diez niños que usan la Internet aceptan haber visto páginas pornográficas en las sesiones de uso de este importante medio. La pornografía ha existido siempre, antes eran revistas como Play Boy y Pent House. Recuerdo una llamada LUZ en la que se presentaban consultas sobre sexología y que de pequeños mirábamos, no con fines científicos, sino para satisfacer el morbo adolescente.

Pero la Internet es accesible a todos, no voy a incurrir en el acto de puritanismo de decir que debe ser prohibida la pornografía de raíz, pero creo que si se debe alertar a nuestros hijos de la cantidad de desviaciones y aberraciones que son promovidas a través de las páginas web. Me contaba un amigo que conoció un caso en el que un joven fue inducido a enviar imágenes propias a través de una cámara web en actividades privadas. En un programa de radio aquí en San Cristóbal llamaron la atención de la práctica de jóvenes de la localidad de publicar imágenes tomadas con teléfonos celulares de teniendo relaciones con compañeras de estudio o muchachas de su misma edad.

Muchos mas son las cosas que podrían comentar al respecto, pero prefiero no ahondar para no caer en detalles y dejar simplemente una alerta para que los padres estén alertas y expliquen a sus hujos las consecuencias del mal uso de la red.

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