martes, febrero 1

ARBOL METEOROLOGO

Aunque parezca increíble, algunos árboles tienen la facultad de ayudar a predecir algunos cambios climáticos, especialmente la llegada de las lluvias. Desde que era niño, le escuché decir a mi padre, quien era agricultor, que un amigo suyo Don Carlos Cadet, le había enseñado que las flores del apamate anunciaban lluvia. Desafortunadamente mi padre y Don Carlos murieron hace años, pero, hace unos tres años he observada el comportamiento de los apamates con el fin de predecir las lluvias, pues me he dedicado dedicando al cultivo de plantas ornamentales y hortalizas en un pequeño vivero ubicado en Peribeca, muy cerca de San Cristóbal; Como mi madre siempre ha dicho, los agricultores se pasan la vida mirando al cielo para ver si va a llover pues de eso dependen sus cosechas y personalmente he podido comprobar que cuando los apamates florecen en efecto vienen lluvias. No me refiero a que la estación de lluvias, que esta bien definida, coincida con la época de floración de los apamates, sino que también las lluvias esporádicas que se producen durante el año durante la estación de sequía son anunciadas por las bellas flores de éstos arbolitos; Por cierto, que buscando en la red alguna literatura sobre este árbol, cuyo nombre botánico es tabebuia rosea, conseguí la información de que el emblemático Samán (albizia saman) también anuncia las lluvias, pero de una manera diferente: cerrando sus hojas, por ésta razón se le llama también árbol de la lluvia. Se cuenta que nuestros indígenas en las épocas de sequía practicaban ciertos ritos bajo la sombra de los más frondosos samanes para clamar por lluvia.
En la Ciudad de San Cristóbal hay gran cantidad de Apamates, destacan los de la Urbanización Las Lomas, sembrados por Don Ramón Matos Pulido, los cuales tienen alrededor de cuarenta años, los del Parque Rió Torbes con cerca de veinte años y los de la Avenida Carabobo con más de veinte. Hoy observé que algunos están comenzando a florecer, les mantendré informados sobre el comportamiento de la lluvia por estas tierras tachirenses.